Antídoto

Letra: Farasch López
Música: Mikie Rivera

Te he citado hoy al café de la esquina.
Te devuelvo tus libros de Pessoa
y tú mis discos de Sabina.
Qué bueno que escogimos la mesa de la esquina.

L luz tortura tus pupilas
y ese humo maldito de los otros
anda amenazando tu vida.

Te recuerdo los días en que desparramabas
sobre la cama il mapas de Argentina.
“Buenos Aires es la tierra prometida” me decías

y hoy en este pequeño San Telmo nuestro
engañamos al pasado
y preferimos el tango al viejo fado
y tarareamos entre dientes
historias de caminos ya andados.

Y es que la vida es así,
corta, cambiante y mezquina,
donde había torres, sopla el viento y deja ruinas.

¿Es cuestión de suerte o brujería?
El caso es que a veces todo se termina.

Te devuelvo la vida que me robaste
en este canto de sal y saliva.
Te devuelvo todo, cariño, te devuelvo la vida.

Sabes que a veces me pasa,
se me enredan pensamientos ente seso y alma.

Como si de una pesadilla se tratara
y me sudan las palabras
mientras se resbalan lágrimas por mi garganta.

Y ahora qué hacemos con aquella cama
sobre la que pende siempre una manzana.

Que nadie la toque, que se quede intacta
por si de repente nos viene un mañana.

Y es que la vida es así, loca, hambrienta y felina.
Hoy tus ojos son reflejo en mi retina.

¿Es cuestión de suerte o brujería?
El caso es que a veces todo se termina.

Te devuelvo la voz y el alma en puros huesos
arrebato tu imagen como bala de mis sesos.

Te devuelvo la vida que me robaste,
transeúnte y nada más, de mi asfixia.
Te devuelvo todo, cariño, te devuelvo la vida.

(solo)

Qué triste es el final, aún es esta tierra prometida.